Muchas veces venís a la farmacia o acudís al médico alarmados porque vuestro peque tiene mucha fiebre y no sabéis por qué, qué hacer, qué darle o cuánto…
En este post os intentaré ayudar a disipar dudas sobre ello y a saber actúar en caso de fiebre en vuestros bebés y niños.
La fiebre es una elevación de la temperatura corporal debido al mecanismo de defensa del organismo, que puede llegar a resultar beneficioso.
Así pues, NO es una enfermedad, sino un síntoma de alguna enfermedad. No es necesario emplear un tratamiento específico para la fiebre e intentar bajarla a la temperatura habitual. Es conveniente paliar los síntomas que la acompañan y calmar el malestar.
Sí es muy importante buscar la causa y estar atentos a síntomas que indiquen problemas con la consecuente visita al pediatra.
Debemos saber que la temperatura del
cuerpo varía a lo largo del día, en función del ciclo
circadiano, reloj biologico humano que regula las funciones fisiológicasque se repiten cada 24 horas. Por tanto, sabemos que a primeras horas del día la temperatura corporal es menor que en la
últimas horas de la tarde, que puede aumentar entre 0.5ºC y 1ºC. Otros motivos, como calor ambiental, ejercicio físico,
reacción a las vacunas, abrigo excesivo… pueden elevar la temperatura de nuestro cuerpo.
La
fiebre en niños suele deberse a alguna infección vírica, siendo las más
frecuentes respiratorias y digestivas. Menos frecuente es la fiebre en respuesta a infecciones baterianas, pero no por ello menos grave, pues la meningitis es
una infección bacteriana y mal tratada, puede llegar a ser mortal.
– CÓMO MEDIR LA TEMPERATURA.
La temperatura se puede medir en diferentes lugares del cuerpo. Debemos tener en cuenta que la temperatura rectal (tomada en el recto, recomendado termómetro punta flexible) es 0.5ºC mayor que la oral (poniendo el termómetro debajo de la lengua) y ésta es 0.5ºC mayor que la axilar.
Se considera fiebre cuando la temperatura corporal es superior a 38ºC (Tª rectal), 37.5ºC (Tª oral) y 37.2 (Tª axilar).
En bebés menores de 6 meses no es recomendable tomar la temperatura oral, para evitar ahogamientos, ni la axilar, pues es muy difícil que estén quietos.
Tomando como referencia la temperatura
axilar, 37.5ºC o menos, es temperatura normal. En temperatura rectal,
menos de 38ºC es normal.
– TIPOS DE TERMÓMETRO.
Para determinar la temperatura, podemos utilizar temómetros digitales, de galio y los que emplean infrarrojos, como los frontales y auriculares (estos últimos no recomendados en menores de 6 meses, pues podemos alterar el conducto auditivo y en esa edad son inexactos). Los de Mercurio ya no se comercializan.
termómetros digitales |
termómetros auriculares |
termómetros frontales |
– CUÁNDO ACUDIR AL PEDIATRA.
Suelen acompañar a la fiebre otros síntomas como decaimiento, dolor de
cabeza, falta de apetito, cansancio, dolor muscular, escalofríos.
Acudir urgentemente al pediatra si:
– El bebé es menor de 3 meses.
– El bebé tiene entre 3 y 6 meses y temperatura superior a 39ºC. A
cualquier edad si la temperatura es superior a 40ºC.
– Si la fiebre dura más de 48-72h.
– Aparecen convulsiones febriles. Suelen ocurrir cuando la subida
de temperatura es muy rápida, sobre todo el primer día de fiebre y
en menores de 5 años. Pueden durar 15 minutos. Hay que acudir al
médico en seguida para tratarlo y descartar otras causas.
– Aparecen petequias. Son puntitos rojos en la dermis que no
desaparecen al estirar la piel. Pueden ser debidas a tos y vómitos,
pero si al presionarlas con un vaso no desaparecen, pueden ser
signo de meningitis. Acudir inmediatamente al médico.
– Rigidez de cuello.
– Gran dificultad al respirar.
– Vómitos o diarrea persistente. (Puede provocar deshidratación)
– Escasez de orina o no orina.
– Irritabilidad, llanto excesivo, difícil de calmar.
– TRATAMIENTO.
La fiebre se puede tratar de diferentes modos, pero siempre bajo
los consejos de un profesional de salud:
CON TRATAMIENTO NO FARMACOLÓGICO:
– Adecuada hidratación: que el niño beba líquidos en pequeñas y
frecuentes tomas.
– No abrigar ni enfriar en exceso al niño. Mantener una temperatura
ambiental templada.
– Desaconsejado el uso de paños húmedos, friegas con alcohol,
bañar al niño, desnudarlo. Sólo si al niño le apetece un baño,
ponerlo unos minutos a remojo en agua templada, nunca fría.
CON TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO:
– NUNCA dar medicamentos sin indicación de un profesional de la
salud.
– RESPETAR la dosis y posología del tratamiento indicadas por el
pediatra.
– NO DAR ANTIBIÓTICO a no ser que la fiebre sea causada por
infección bacteriana y siempre indicado por el pediatra. Su mala
utilización es la causa principal de resistencias. No curan
infecciones víricas, para ellas son los antivirales.
– Para bajar la fiebre se emplean ANTIPIRÉTICOS.
Sobre todo Paracetamol e Ibuprofeno. El Ácido Acetilsalicílico no se
debe dar en niños para evitar el Síndrome de Reye.
Son la triple A (AAA): Antipiréticos, (bajan fiebre), Analgésicos
(calman dolor) y Antiinflamatorios.
Su dosificación ha de ser en función del peso, no de la edad.
El Paracetamol es sobre todo antipirético y Analgésico, y en
menor medida, Antiinflamatorio. Su dosis es 10-15mg/kg cada
6-8 horas.
El Ibuprofeno es sobre todo Analgésico y Antiinflamatorio, y en
menor medida, Antipirético. Su dosis es 5-10mg/kg cada 6-8
horas.
No hay pruebas que demuestren que administrarlos alternos
sea más eficaz. Sí que aumenta el riesgo de confundir dosis,
o pauta. También aumenta el riesgo de que aparezcan efectos
no deseados.
Hay que tener en cuenta los efectos secundarios, hablo de
ellos en
http://mifarma12h.blogspot.com.es/2014/04/los-medicamentos
-no-son-chuches.html
No conviene dar antipiréticos después de poner vacunas para
prevenir la posible aparición de fiebre posterior.
Os recomiendo el «Decálogo de la fiebre» de la Asociación Española de
Pediatría:
Más información en :
Espero que os haya gustado y sea útil el post!!
Teresa Gil Alegre. Farmacéutica Adjunta.