En la farmacia dispensamos muchos productos para el cuidado de la salud bucal, como dentífricos, colutorios y cepillos de dientes. Sin embargo, observo que muy poca gente pregunta por la seda dental. Para muchos es prescindible, sin embargo, es un paso más en la higiene bucal, tan importante como un buen cepillado con el dentífrico adecuado y el enjuague con colutorio. No olvidemos los cepillos interdentales, también útiles pero olvidados.
Al cepillarnos los dientes, sólo limpiamos hasta un 50% de la superficie dental. La seda dental es un complemento del cepillado, pues limpia lugares de la boca donde el cepillo no llega, como los huecos interproximales (entre dientes) y bajo la encía. Así evitamos que se acumule ahí placa y restos de comida, evitando la aparición de caries y enfermedades gingivales y periodontales, por lo que se recomienda la utilización de la seda dental a diario, después de cada comida y en el lavado de dientes antes de acostarnos.
TIPOS DE SEDA DENTAL.
Las sedas dentales están compuestas por filamentos de nylon unidos (multifilamento). Se presentan con cera o sin ella, con distintos sabores, con flúor o sin él. Con cera es ideal para gente que empieza a utilizar la seda dental, pues se desliza con más facilidad, sin dañar zonas blandas. Sin cera es recomendado en gente con experiencia en el uso del hilo dental, su capacidad de arrastre es mayor. Los hilos multifilamento, al estar compuestos por varias fibras de nylon, a veces pueden deshilacharse, sobre todo al pasarlo entre dientes muy juntos.
Los hilos dentales suelen ser monofilamento o PFTE. Se deslizan fácilmente entre los dientes, sobre todo en espacios muy estrechos, y no suelen deshilacharse. También se presentan con cera o sin ella, con flúor o sin él.
También encontramos las cintas dentales, formadas por fibras de perfil plano y delgado. Tienen una superficie de arrastre mayor que el hilo dental, y normalmente llevan cera para facilitar su deslizamiento. Ideal para espacios entre dientes muy juntos o montados.
Para espacios interdentales más anchos, recomiendo el uso de los cepillos interdentales.
Existen aplicadores de hilo dental, que facilitan su utilización. Pueden ser desechables, cada aplicador lleva un segmento de hilo; o reutilizables, el aplicador y el hilo van por separado, ponemos nosotros el hilo en el aplicador.
En el mercado encontramos también enebradores de seda y cinta dentales, que facilitan y guían su entrada entre espacios interdentales. Ideal para personas con ortodoncia, prótesis, implantes y para espacios de muy difícil acceso.
CÓMO UTILIZAR EL HILO DENTAL.
Tomamos unos 50 cm de hilo. Enrollar los extremos alrededor de los dedos corazón de cada mano, dejando un segmento de 3 a 5 cm de hilo para utilizarlo.
Agarrar este segmento con los dedos pulgar e índice el hilo y estirar para que quede bien tirante.
Pasar el hilo entre los dientes superiores y luego entre los dientes inferiores, haciendo un suave movimiento en zigzag, hacia arriba y hacia abajo de los dientes. No rozar la encía porque podríamos dañarla.
Utilizar segmentos de hilo limpios para limpiar cada espacio interdental.
Espero que os haya gustado el post!!
Teresa Gil Alegre. Farmacéutica Adjunta.
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